Traducción e Inteligencia artificial
Tengo la impresión de que la vida se ha acelerado, los descubrimientos, tecnologías aparecen unos tras otros con mayor celeridad.Son tiempos más fáciles aunque cueste trabajo mantenerse al día. Aunque a decir verdad ni siquiera nos hace falta mantenernos al día. No logramos dominar una y ya la próxima la hace obsoleta. Son otros tiempos. Hace una semana descubrí, con retraso, pobre de mí; el uso de la inteligencia artificial para elaborar textos.Una tarea para mí muy importante pues mi trabajo consiste en elaborar información 100% en otro idioma que no es el mío y que se rehúsa a entrar en mi cabeza. Al menos al nivel que se me exige.No había usado la inteligencia artificial porque he usado Deepl desde hace más de un año con resultados muy satisfactorios. Podría decir que me cubrió en un 90% de los casos, cosa que está ya por encima de la media alemana porque aunque suene raro, este idioma es incluso difícil para los nativos. No veas cómo se habla en las calles de Berlín.Pues ahora que comenzaba mi mudanza a Chat GPT, los de Deepl me piden que antes de que me vaya, pruebe la nueva funcionalidad “Deepl Write” solo disponible en inglés (americano y británico) y alemán por el momento. Precisamente lo que yo necesito.Pueden ver el resultado en las imágenes. Ya no solo es el mejor traductor del mundo, con diccionario y glosario de tus propias palabras sino que ahora además hace corrección de estilo. La diferencia entre el texto de la izquierda en alemán (traducido por Deepl) y el texto de la derecha (corregido el estilo por Deepl) es como la diferencia entre un texto escrito por un estudiante de noveno grado y el de un profesor universitario.Esto puede parecer trivial, pero para mí, significa la diferencia entre tener este empleo y la calle. Alguien que invierte millones en un edificio no va a aceptar documentación con una falta de ortografía siquiera. Mucho menos en Alemania.